Desarrollar innovaciones en el ámbito público es una tarea reconocida y demandada desde distintos posicionamientos. Sin embargo, en algunos enfoques sigue firme en su base la convicción que los problemas sociales provienen de la gente y las políticas proveen la solución. Este núcleo busca poner el foco en un concepto de innovación que subvierte esa convicción y coloca una relación entre déficit y fallas de las políticas públicas y el despliegue de procesos de transformación y mecanismos de ajuste.
Esto supone modificar la interpretación que desde hace décadas se tiene de una teoría del riesgo cuyo eje consiste en señalar vulnerabilidades existentes en personas y comunidades. Desde ella emergen niños, jóvenes, familias, barrios “vulnerables” que requieren entonces ser asistidos y fortalecidos por las políticas públicas. Desde esa visión se piensan una serie de transferencias de valor e implementaciones que se despliegan en programas e iniciativas diversas.
Lo que sostenemos es una inversión de esa lógica: no existen sujetos vulnerables. La vulnerabilidad, la precariedad y la fragilidad se expresan en los sistemas de oferta pública y privada que impactan a determinadas personas, comunidades y territorios con servicios de altos grados de descoordinación y bajos niveles de calidad. Esto permite observar las crisis como mecanismos producidos por los propios sistemas y proponer innovaciones en esa línea de fallas.
Lo anterior coloca un segundo eje de innovación: cambiar las formas de diseñar, implementar y evaluar las políticas públicas. En ellas prima una evaluación de impacto asociada a la demanda, donde hay que esperar para ver los resultados provocados en los sujetos.
Lo que este núcleo propone es un análisis de la efectividad de sus diseños y en el desarrollo de una evaluación de impacto de los niveles de calidad de las ofertas, ya que, si ellas son desajustadas y deficitarias, así lo serán sus resultados. Esta disrupción permite una observación anticipada y la generación de sistemas de alerta que bajen los niveles de riesgo de inversión, fortalezcan los equipos profesionales de los programas sociales y entreguen a las políticas públicas una noción de innovación que promueva su efectividad.
Mediante este proyecto se propone aportar elementos que permitan analizar y explicar el rol de las distintas instituciones (comunitarias, publicas, sanitarias, privadas) de abordaje de consumos problemáticos. Interesa aquí centrarnos en la accesibilidad y adecuación de éstas en un trabajo en red, como así también identificar como definen los lineamientos de trabajo, de respeto hacia las personas que consumen drogas de forma problemática, sus familias y sistemas de apoyo como así también sus comunidades. Para ello, se relevarán y sistematizarán las principales modalidades de atención, la continuidad de cuidados, las modalidades de ingreso, egreso y enlace de dichos centros de atención, procurando asimismo explorar las formas de construcción de institucionalidad territorial y trabajo en red que viabilizan dicha accesibilidad, a través de los relatos de las comunidades, trabajadores y usuarios. Los enfoques de riesgo suelen estar presentes en este tipo de respuestas institucionales vedando otras dimensiones y empobreciendo la temática. De allí la potencia que tiene estudiar y relevar para innovar.
La situación de calle es una de las manifestaciones más extremas de la exclusión social, reflejándose en la privación material y en la dificultad para participar en la vida comunitaria con seguridad y autonomía. Prevenir que más personas lleguen a esta situación requiere de acciones coordinadas y políticas integrales que aborden tanto los riesgos y vulnerabilidades estructurales como las individuales. La situación de calle resulta de la interacción de múltiples factores, que van desde condiciones económicas adversas hasta fallas sistémicas en la protección social y en el acceso a servicios esenciales, para abordar esta situación es fundamental implementar acciones diferenciadas y especializadas que eviten, por una parte, que más personas terminen viviendo en situación de calle y, por otra, que se mitiguen los efectos e impactos de quienes la han vivido. El fenómeno de situación de calle, también llamado sinhogarismo en otro país, es un problema estructural que combina la falta de vivienda con la vulneración de derechos vinculados a la protección y a la asistencia. En muchos países se reconoce como una de las mayores formas de exclusión. Si bien no hay consenso en la magnitud del problema, las cifras oficiales estiman que cerca de XX personas al año se encuentran en situación de calle en nuestro país. Las OSC consideran que esta cifra se dobla cuando se analizan las coberturas de programas y prestaciones dirigidas a esta población. Más allá de las diferencias en la magnitud, es un problema dinámico con una complejización creciente, ya que se le adicionan otros factores como crisis migratoria, cambios demográficos, problemas económicos, cuestiones de salud pública y otros. La situación de calle es una manifestación de la exclusión social que afecta principalmente a las grandes ciudades, pero que también tiene expresiones locales en ciudades intermedias y zonas de tránsito, incluyendo pasos fronterizos, terminales de transporte, etc. Históricamente en Chile ha habido intervenciones públicas dirigidas a PSC, las que se han caracterizado por: su estacionalidad, condicionar las prestaciones a las actitudes de los sujetos y operar bajo esquemas de subsidiariedad/caridad.
Frente a la pregunta de por qué incluir a Niñas, Niños y Adolescentes (NNA) en la
producción de conocimientos sobre aquellos aspectos y decisiones que afectan su vida diaria, y en concordancia con lo establecido por la Convención de los Derechos de la Niñez (CDN), los actuales y futuros desafíos medioambientales, sanitarios, migratorios y políticos, entre otros, y sus subsiguientes consecuencias ofrecen una serie de poderosas razones asociadas a: 1) la subjetividad en que cada NNA está vivenciando estos desafíos, 2) la necesidad de abordar colectiva e inter generacionalmente las implicancias de estos desafíos y 3) las persistentes repercusiones psicosociales y socioeducativas que están teniendo en el bienestar de NNA, afectando diversos aspectos tales como su salud mental, bienestar socioemocional, redes sociales de apoyo e indicadores de aprendizajes, en un sentido integral (Reimers, 2021; Andrew et al., 2020; Brito et. al, 2020; Children’s Society, 2020; Eyzaguirre, 2020, Salas et. al, 2020). En este sentido, la inclusión de NNA en la generación de conocimiento ofrece la oportunidad de abordar de manera integral estas repercusiones y desarrollar estrategias de intervención pertinentes, especialmente en los ámbitos educativo, social y de salud mental (Condeza, 2022; Cuevas Parra, 2020). En este contexto, el objetivo general de este proyecto sería identificar, analizar y facilitar las instancias de participación efectiva de niños, niñas y adolescentes existentes, con el propósito de diseñar modelos teóricos y estrategias metodológicas para la participación efectiva de niños, niñas y adolescentes en la creación de conocimientos en los asuntos que les afecten e interesen.
El estudio del Bienestar ha sido abordado por diversas disciplinas y enfoques metodológicos, la definición del bienestar en sí misma es polisémica y la identificación de sus componentes, su análisis y el diseño de políticas y programas de intervención para los diferentes grupos poblacionales es un desafío intelectual pensando en la gran diversidad de grupos humanos que componen la sociedad contemporánea. El modelo económico y social en Chile ha producido una cultura del trabajo con salarios precarios y jornadas ampliadas (44 hrs a la semana)
que lo coloca entre los países con mayor cantidad de horas laborales de la OCDE. Este modelo ha ampliado las brechas de desigualdad entre los distintos sectores de la sociedad y ha tenido
consecuencias sociales y culturales que se han profundizado y que ha encontrado manifestaciones negativas en las dinámicas relacionales entre las personas con el incremento de la inseguridad y el crimen haciendo que el sistema penitenciario sea insuficiente para contener en condiciones dignas a una creciente población en conflicto con la ley. Por otro lado, la crisis del modelo se expresa igualmente con serios cambios en los tipos de familia, un deterioro en las dinámicas familiares, modelos de crianza y las interrelaciones con los hijo/as.
Dado este panorama se proponen dos vías para abordar el estudio del bienestar en algunos grupos específicos de la sociedad chilena:
1.La relación familia trabajo y sus efectos en el bienestar subjetivo de familias nucleares con hijos adolescentes
2.El bienestar material y subjetivo de personas privadas de libertad en el sistema penitenciario chileno.
Docente responsable: Gabriela Rubilar.
En las últimas décadas Chile ha desarrollado acciones clave para abordar la problemática de la situación de calle. Las organizaciones de la sociedad civil e instituciones vinculadas a la acción social desarrollaron procesos de incidencia que permitieron aunar esfuerzos para contar y visibilizar esta situación (primer catastro de situación de calle realizado el 28 de julio de 2005 – segundo catastro situación de calle 16 al 21 de agosto de 2011), abogando por una acción sostenida en el tiempo que hoy se traduce en un conjunto de programas sociales (https://www.desarrollosocialyfamilia.gob.cl/programas-sociales/personas-en-situacion-de-calle).
Estos procesos de incidencia, sumados a la revisión del panorama internacional permitieron la creación de programas específicos vinculados a los ejes del sistema de protección social. Las últimas cifras muestran que el año 2022 se atendieron un total de casi 40 mil personas distintas en todos los servicios ministeriales para este grupo (Comité de expertos, 2023). Los sistemas de registros (Anexo Calle – RIS) indican un aumento de la intensidad y complejidad de dichas realidades y las organizaciones que intervienen en la temática han hecho explícita la necesidad de: Coordinar la oferta y trabajar intersectorialmente (Cunill, 2014). Articulación público-privada y trabajo en red para evitar la fragmentación. Intervenciones no condicionadas basadas en derecho.
Este proyecto funciona desde hace 5 años en lógica I+D lo que ha permitido la publicación de artículos conjuntos:
Docentes responsables: Mahia Saracostti/Claudia Campillo
La evidencia científica muestra que la promoción de trayectorias educativas positivas se vincula con mejores proyecciones en el curso de vida de las personas y las sociedades. Dichas trayectorias educativas se caracterizan por ser diversas y heterogéneas; y por estar influidas por factores individuales, estructurales y contextuales como, por ejemplo, la pandemia. Producto de dicha crisis sociosanitaria y la suspensión prolongada de clases presenciales, el sistema educativo en Chile entró en una compleja coyuntura (violencia, ausentismo, exclusión educativa En este contexto, el Compromiso escolar (CE) es considerado un concepto primordial para promover la vinculación de niños, niñas y adolescentes con el sistema escolar. Además, es un predictor de las variables que intervienen en el logro de trayectorias educativas positivas reflejándose en resultados tales como el rendimiento, asistencia, promoción entre niveles y ciclos educativos, graduación escolar y/o transición a la educación superior, entre otros. El compromiso estudiantil se entiende como la activa participación del estudiante en actividades académicas y extracadémicas que se visualiza en el involucramiento. Estudiantes comprometidos afectivamente, se sienten parte de una comunidad escolar que es significativa en sus vidas, abarca conductas positivas hacia los profesores, compañeros y la escuela. El compromiso conductual, por su parte, se basa en la idea de participación en el ámbito académico (por ej., asistencia a clases o participación en organizaciones estudiantiles), incluyendo las interacciones y respuestas del estudiante. Por último, el compromiso cognitivo ha sido entendido como el proceso mediante el cual se incorpora la conciencia y voluntad para construir aprendizajes. Por otro lado, el CE es influenciado por Factores contextuales y relacionales que permiten sostener el proceso socioeducativo: 1) Apoyo de la familia; 2) Apoyo de los pares y 3) Apoyo del profesorado. Este proyecto se basa en proyectos de I+D previos que tuvieron como resultado el diseño y validación de un Sistema Integrado de Evaluación, Monitoreo y Estrategias de Promoción de Compromiso Escolar y Factores Contextuales (SIESE) para estudiantes desde 5° básico a 4° medio alojados en una plataforma Web (www.compromisoescolar.com). De esta manera, los y las estudiantes se insertarán en investigaciones en curso en el ámbito escolar, apoyando en la identificación, generación y sistematización de estrategias de intervención socio y psicoeducativas. Se trabajará con profesionales, familias y/o niños, niñas y adolescentes.
Este proyecto supone que el estudiantado se suma a un equipo de investigadores/as consolidados. Tendrán la oportunidad de interactuar con un equipo investigador interdisciplinario y de distintas universidades. También de participar en algunas de las partes de una línea de proyectos financiados por la Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo (Anid) Se incentivará la participación de los y las estudiantes en actividades de divulgación de resultados que sean de su interés, como por ejemplo congresos científicos, participación en reuniones científicas, actividades con las comunidades escolares y/o sostenedores educativos y/o reuniones con actores políticos, entre otros.
Docente Responsable: Juan Ignacio Lozano
Mediante este proyecto se propone aportar elementos que permitan analizar y explicar el rol de las distintas instituciones (comunitarias, publicas, sanitarias, privadas) de abordaje de consumos problemáticos. Interesa aquí centrarnos en la accesibilidad y adecuación de éstas en un trabajo en red, como así también identificar como definen los lineamientos de trabajo, de respeto hacia las personas que consumen drogas de forma problemática, sus familias y sistemas de apoyo como así también sus comunidades. Para ello, se relevarán y sistematizarán las principales modalidades de atención, la continuidad de cuidados, las modalidades de ingreso, egreso y enlace de dichos centros de atención, procurando asimismo explorar las formas de construcción de institucionalidad territorial y trabajo en red que viabilizan dicha accesibilidad, a través de los relatos de las comunidades, trabajadores y usuarios. Los enfoques de riesgo suelen estar presentes en este tipo de respuestas institucionales vedando otras dimensiones y empobreciendo la temática. De allí la potencia que tiene estudiar y relevar para innovar.
Con esta investigación se pretende generar información que sea relevante para el diseño y aplicación de políticas públicas que mejoren el abordaje en salud mental y consumos problemáticos, que impacte en los canales de accesibilidad al derecho a la salud y la continuidad de cuidados en clave comunitaria.
Postula y se parte del equipo activo en este Núcleo I+D del Departamento de Trabajo Social de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Chile.